La animación erótica japonesa ha logrado llegar al público de todo el mundo, y no es para menos, ya que el hentai da rienda suelta a muchas fantasías comunes que se encuentran presentes en la mente tanto de hombres como de mujeres. Este tipo de historias tienen una temática muy variada y pueden contar situaciones que incluyen prácticas BDSM, bukkake, gangbang e incluso hacen referencia a la estética de los personajes que en ella hacen vida.

De esta forma uno de los subgéneros más demandados es el denominado futanari, en el que los personajes tienen como característica principal el hermafroditismo. Este tipo de contenido tiene mucho sentido dentro de la animación erótica, ya que una peculiaridad del hentai es dar visibilidad a todos los aspectos dentro de la actividad sexual, y este tipo de anime presenta a sus personajes femeninos con un portentoso órgano reproductor masculino. Estas chicas futanari generalmente terminan obteniendo un rol dominante.

¿Cuál es el origen de futanari?

Futanari es una palabra de origen japonés y está compuesta por la palabra Futatsu que significa ‘dos o segundo’, y la palabta Nari que podría ser traducida como ‘forma’. Así, la interpretación literal que podría darse sería la de ‘dos formas’, pero yendo un poco más allá tendría una relación directa con la palabra hermafrodita. Y es que, es un término que en la cultura nipona está referido a la indeterminación sexual.

No cabe duda de que estas historias representan uno de los tabúes más significativos de la sociedad, tratadas desde lo imaginario respondiendo a fantasías y deseos que pueden estar reprimidos.

Hermafroditas en el hentai

Es así como el futanari se ha convertido en ese subgénero del hentai en el que los principales personajes femeninos poseen ambos órganos reproductivos. Por lo general se trata de chicas muy hermosas que están dotadas con penes desproporcionados, una característica típica de la animación erótica. Pero puede existir también historias en las que este tipo de personajes comienzan siendo mujeres en su totalidad, para luego al llegar al máximo nivel de fetichismo el personaje cambie emergiendo un enorme pene en su cuerpo.

En este tipo de personajes también es posible encontrar aquellas chicas que tienen condición de transexualidad, por lo que sufren en muchos casos conflictos entre su identidad de género y su género biológico.

Historias típicas del futanari

Este subgénero de animes eróticos tiene historias muy representativas dentro de las que están Bible Black o Blue Girl. En este tipo de historias se puede ver claramente a chicas muy jóvenes disfrutando de veladas muy apasionantes. Pero sin duda la característica que hace tan especial este tipo de hentai, es la forma en la que las chicas presentan tanto órganos reproductores femeninos como masculinos.

En algunos casos puede suceder que estos personajes aparezcan con su torso de mujer e incluso se muestre como otra le estimula su vagina, pero lo sorprendente es que de repente y debido a la excitación, les aparece un enorme pene en su entrepierna.

Por su parte, también hay escenas en las que estas chicas que presentan senos y una contextura de mujer de cintura para arriba, al desnudarse por completo se enfoca un miembro masculino con el que sorprenden al resto de personajes, y por supuesto al espectador.

El futanari se ha convertido entonces en la manera perfecta para dar rienda suelta a todos esos deseos reprimidos y que son todavía tabú en la sociedad. Puede que en Japón haya una cultura ante este tipo de temas relacionados con la diversidad sexual, algo que quieren exportar al resto del planeta con animaciones eróticas que presentan situaciones que van más allá de la imaginación.